Un consorcio privado conformado por la española Técnicas Reunidas (TR) y la italiana Tecnimont se adjudicó los servicios FEED-EPC de la Planta de Propileno y Polipropileno, la mayor inversión en la historia del país. El contrato que está por ser suscrito entre YPFB y la sociedad permite la adjudicación directa del megaproyecto a ambas empresas.
Los procesos de Ingeniería Básica Extendida (FEED) y de Ingeniería de Detalle, Procura y Construcción (EPC) fueron conferidos oficialmente por YPFB “a la unión temporal de empresas Tecnimont-Técnicas Reunidas. Lo que no se ha firmado aún es el contrato, entiendo que eso se hará “en los próximos días o semanas”, informó a La Razón el gerente general en Bolivia de la multinacional española, Luis María Villar.
La asociación, detalló, tendrá “10 meses” para concluir la fase de FEED a partir de la entrega por parte de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) de la notificación de “inicio de trabajos”, algo que ocurrirá cuando la estatal haya adjudicado la fiscalización de la obra, que se ubicará en la provincia tarijeña de Gran Chaco.
La etapa de FEED, cuyo contrato es de $us 12,35 millones, permitirá fijar un costo final para el proyecto, calculado de forma preliminar en $us 2.200 millones, continuó. “Si Yacimientos considera que el precio (final) que se le pondrá al proyecto es el adecuado, nos podrá adjudicar directamente” a la sociedad Técnicas Reunidas-Tecnimont la construcción del complejo petroquímico, adelantó el ejecutivo.
La opción de asignación sin licitación, explicó Villar, estará establecida en el contrato y puede ser posible debido a que durante la licitación del FEED-EPC el consorcio italoespañol ofreció continuar la EPC con el porcentaje más bajo “de conversión” sobre el costo final del proyecto (7%), es decir, el monto adicional más bajo que permitirá cubrir “contingencias, riesgos, gastos generales” y otros. “Fuimos los más baratos”, apuntó Villar. La segunda oferta más baja fue de 16%.
En el proceso de adjudicación participaron 15 empresas, cinco presentaron sus propuestas, entre ellas Samsung y Odebrecht.
Gran Chaco necesita 32 MMmc de gas al día
La capacidad instalada para producir GLP de la planta no se aprovecha
Para que la planta Gran Chaco funcione al 100% de su capacidad es necesario que Bolivia exporte a Argentina “32 millones” de metros cúbicos día (MMmcd) de gas natural, informó Luis María Villar, gerente general de Técnicas Reunidas, empresa que estuvo a cargo de la construcción de la separadora de líquidos.
Para entregarla a YPFB, en agosto de 2015, “Gran Chaco se probó al 100% en todos sus modos de operación”. Lo que ocurrió después, dijo, ya es un “tema comercial operativo” ajeno a la empresa española, que según contrato prestará aún asistencia técnica al operador de la planta hasta agosto de este año.
Datos del proyecto de Ley Financial 2017 proyectan que este año YPFB producirá para Argentina en promedio 14 MMmcd de gas, volumen que está por debajo de los 16,4 MMmcd mínimos determinados por contrato entre ambos países para el verano y de los al menos 19,9 MMmcd definidos para el invierno (del 1 de mayo al 30 de septiembre) de esta gestión. YPFB Transporte reportó por su parte que entre los días 1 y 7 de este mes, el país envió en promedio 15,44 MMmcd del energético a ese mercado.
Gran Chaco nació con el objetivo de destinar al mercado externo 656.124 de las 820.155 toneladas (t) de GLP que puede producir por año, es decir el 80%, pero en 2016 lo exportado por el país solo llegó a 103.268 t, eso es al 12,6% de la capacidad total instalada de la separadora de líquidos, según información del Instituto Nacional de Estadística procesada por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior.
Este porcentaje de capacidad instalada ociosa para la fabricación de GLP sería mayor si se tomaran en cuenta los excedentes que deja la Planta Río Grande, que desde mayo de 2013 alimenta principalmente el mercado interno con una capacidad productiva de 131.765 t al año.
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