La planta de urea y amoniaco de la región de Bulo Bulo en el trópico de Cochabamba está concluida y la prueba técnica de sus equipos se inició en las últimas horas, informó ayer la presidenta de la Comisión Segunda de la Asamblea Legislativa Departamental, Leonilda Zurita.
“Ahora ya está concluida la planta (...). Está haciéndose algunas pruebas, las máquinas están funcionando y ya saliendo la urea”, informó en conferencia de prensa.
El exgerente de YPFB, Saúl Escalera, recomendó al Gobierno destinar la producción a procesos de industrialización y valor agregado. Presentó recientemente un proyecto de modelo productivo para tal fin, destacando el impacto de la planta en el desarrollo local, regional y nacional.
Según la asambleísta departamental, “20% de la producción atenderá al mercado interno, al tiempo que el restante 80% se dirigirá a la exportación, fundamentalmente a Brasil y Argentina, con ingresos estimados de 200 millones de dólares anuales”, complementó.
INVERSIONES
Según datos oficiales, la planta de urea y amoniaco se financia con 862,5 millones de dólares, la inversión más alta registrada en la historia de Bolivia y está a cargo de la empresa coreana Samsung Engineering Co. Ltda.
Los fertilizantes obtenidos allí proveerán nitrógeno a los cultivos de soya, maíz, arroz, papa, girasol, trigo y caña de azúcar, entre otros, además de mejorar la calidad de los productos agrícolas.
INSPECCIÓN
Según Zurita, la verificación de la culminación de ese proyecto se hizo el fin de semana pasado, mediante una inspección realizada por un grupo de asambleístas en el lugar de su emplazamiento.
Explicó que los representantes regionales que llegaron a ese lugar establecieron que el complejo fue emplazado en un sector de las más de 247 hectáreas de terreno que fueron proporcionados para sus operaciones.
“En 20 hectáreas se ha podido construir las tres bases (de la planta), tanto la parte de la urea y amoniaco como de las utilidades. Luego se tiene un acceso de pavimento de más de 28 kilómetros de longitud y 14 de ancho”, complementó.
Asimismo, Zurita dijo que el personal del complejo petroquímico explicó a los asambleístas que la fase de pruebas de equipos se hará durante tres días, para luego efectuarse una evaluación de posibles fallas por el lapso de un mes.
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