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Más de un centenar de personas identificadas como vecinos de zonas alejadas al centro de la ciudad, ayer protagonizaron una marcha nocturna, desde el mercado Campero, en protesta contra el “tarifazo” que impusieron algunos transportistas del servicio público, tras el incremento en el precio de los carburantes.
La marcha se inició después de que la turba, molesta por la decisión de los chóferes de minibuses de cobrar 2.50 bolivianos el pasaje, protagonizara algunos altercados con los minibusistas que fueron víctimas de la rabia contenida de los transeúntes que luego decidieron marchar hacia la Plaza 10 de Febrero.
La medida de protesta recorrió la calle Bolívar, desde la Pagador, hasta llegar a la Plaza 10 de Febrero donde dieron la vuelta y bajaron nuevamente por la calle Bolívar, para quedarse en el mercado Campero haciendo detener a los minibuses que seguían transportando pasajeros, para hacerles conocer que hoy, el control en el precio del pasaje, especialmente de los minibuses, será más estricto, advirtiendo que no permitirán el excesivo incremento que llega al 150 por ciento en relación a las tarifas vigentes hasta el domingo.
“Si mañana (hoy) los dirigentes no se movilizan es mejor que renuncien, porque no están con el pueblo, no vamos a permitir el cobro de 2.50 bolivianos, se debe controlar a los minibusistas porque incluso el taxi está cobrando arriba de diez bolivianos, es demasiado”, mencionó uno de los protagonistas que no quiso identificarse.
La protesta fue asumida por las personas que protagonizaron la marcha, pero también fue controlada por efectivos policiales del PAC, (Patrulla de Auxilio y Cooperación Ciudadana), en el recorrido que concluyó aproximadamente a las 22:30 horas.
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