Analistas energéticos alertan efectos

Analistas del sector energético consideran que si bien acabar con la subvención a los combustibles en Bolivia era algo ‘necesario’, la medida de ‘schok’ por la que se optó para corregir esa distorsión de precios causa una espiral de efectos negativos en la economía.
Aún se aguarda con cautela conocer los efectos del incentivo a las petroleras anunciado por el Gobierno para que generen más producción de crudo.
En la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía (CBHE) indicaron que están a la espera de los detalles del decreto, sobre todo para ver de qué se trata el incentivo de los $us 59 por barril al que se refirió el ministro de Hidrocarburos, Fernando Vincenti.
Mario Suárez Riglos, geólogo petrolero, considera que la nivelación de precios debería haber sido gradual. “Era necesario acabar con la subvención, pero se la podía haber hecho paulatinamente con otro tipo de medidas económicas. Ahora se va a sentir un efecto dominó en la economía. No se hizo una buena política hidrocarburífera estos años”, afirmó.
El experto en hidrocarburos y ex presidente de la Feria del Gas Carlos Chalup también criticó la medida. “El ‘gasolinazo’ es la demostración del fracaso de la política económica actual. Es el síntoma de una grave crisis fiscal que desmiente la versión oficial sobre una supuesta solidez”, afirmó.
Un experto del sector energético, que prefirió el anonimato, coincidió en que la medida era necesaria para enfrentar el contrabando de hidrocarburos, pero alertó que la decisión de corregir la distorsión de precios mediante shock “va a tener un impacto negativo en el ingreso real de la población”.
Manifestó su incertidumbre sobre el incentivo a las inversiones petroleras a partir de esa medida. “Lo publicado en la Gaceta, hasta el momento indica que hay un aumento en el IEHD, lo que quiere decir que será una medida más para la economía del fisco que para incentivar inversiones en el sector, pero falta evaluar”, dijo.

La región

Bolivia. Según datos divulgados por la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), el litro de diésel en el territorio nacional está en $us 0,97 y la gasolina especial en $us 0,92.

Argentina. En el vecino país, el litro de la gasolina se sitúa en $us 0,24 y el diésel, en 0,16.

Brasil. La gasolina supera los $us 1,6 el litro y el diésel llega a $us 1,5.

Perú. La gasolina especial cuesta $us 0,57; la premium, $us 0,80 y el litro de diésel, $us 0,137.

Chile. Los datos recopilados por la Cainco señalan que el litro de la gasolina está en $us 1,35 y el diésel, en $us 1,02.

Opinión

“Empobrecerá a las familias”
Waldo López | Col. Economistas de Bolivia
Creo que el análisis financiero y del contrabando que hace el Gobierno es correcto, pero no así el análisis del impacto social negativo. En política económica muchas veces se peca de eficiencia financiera y se olvida el efecto social regresivo, como se da en este caso. Muchas veces se dieron estas medidas con la justificación del déficit presupuestario, pero a diferencia del pasado en este caso hay superávit presupuestario y no existe una gran necesidad de ingresos para el Estado. Tampoco el incremento de salarios para el sector público puede ser una justificación para crear un efecto inflacionario para el conjunto de la economía con efectos de empobrecimiento de miles de familias bolivianas.
Evidentemente, el incremento de los precios de los hidrocarburos mejora la situación financiera del Estado y disminuye el contrabando, pero golpea duramente la economía del pueblo.

Opinión

“El modelo no funcionó”
Gonzalo Chávez | Economista
Cómo es posible que en esta bonanza económica y fiscal tengamos que apelar a medidas de orden neoliberal como en el pasado. Ésta es una pregunta que hay que trasladarla a las autoridades gubernamentales, porque nos decían que estábamos muy bien; sin embargo, esto demuestra que hay cierta desesperación en las cuentas públicas porque están faltando plata para gastos básicos que hay en la economía.
Por otra parte, también es una medida parcial porque no se sacó el subsidio a las garrafas de GLP, que significan una parte importante en el gasto.
Entonces, no es realmente un sinceramiento completo de la economía.
Esto es justamente para evitar las importaciones de diésel que vienen de Venezuela.
Esto demuestra que el modelo no ha funcionado en YPFB porque no están los líquidos y ahora surge el problema porque tenemos que pagar la mala gestión.