La Fiscalía suspendió ayer, en Santa Cruz, la declaración del empresario José Luis Sejas Rosales, excontratista de YPFB para el transporte de hidrocarburos e investigado por una supuesta vinculación con el tráfico de sustancias controladas. La ausencia de dos de los tres fiscales de la comisión que investiga el caso narcocisternas fue el motivo de la suspensión. Por el momento no hay nueva fecha de citación para el aludido.
La comisión de fiscales de la oficina del Ministerio Público asignada a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) de Santa Cruz había citado a Sejas Rosales para que preste su declaración el martes 18 de agosto a las 09:00.
El empresario se presentó a la hora indicada con sus dos abogados, Walter Suárez y Jerjes Justiniano, pero no pudo declarar debido a la ausencia de dos fiscales. Como el proceso de investigación fue declarado en reserva, nadie dio explicaciones por parte del Ministerio Público y sólo Justiniano dio la información de forma escueta.
La semana pasada se presentó a declarar el exgerente nacional de Comercialización de YPFB, Mauricio Marañón, que renunció a su cargo de forma coincidente con el estallido del caso narcocisternas. Sin embargo, el presidente de la estatal petrolera, Guillermo Achá, aseveró que la salida de Marañón no tenía nada que ver con el proceso y también deslindó responsabilidad en el tema.
Enmienda de Monasterio
El diputado opositor Tomás Monasterio (UD), denunciante del caso narcocisternas, reconoció ayer como un error haber afirmado que el empresario Sejas Rosales tenía nueve causas pendientes en Argentina por narcotráfico, porque son 13 en total, además de la orden de captura internacional.
Monasterio aclaró ayer que sus denuncias no son para descreditar a YPFB Corporación, sino que son en contra de “malos funcionarios públicos que avalaron contratos de una empresa del Estado, firmando contratos con empresas privadas vinculadas a actividades ilícitas (sic)”.
Las 13 causas contra Sejas Rosales por presunto tráfico de drogas se ventilan en la justicia federal de Salta, donde además buscan unificar las investigaciones. El empresario está acusado de ingresar una tonelada de cocaína a Argentina, según publicó la agencia estatal Telam.
Investigación
La información que hay en medios argentinos señala que después de encontrar varios casos de cisternas que traficaban con cocaína o con precursores, los investigadores concluyeron que se trataba de un mismo modus operandi, cuyo denominador común era el ocultamiento de la carga de estupefacientes en camiones de la firma Creta SRL, perteneciente a Sejas Rosales, con base en Santa Cruz.
La Procuraduría de Argentina busca demostrar que se trata de una organización “narcocriminal” internacional.
También se busca que no sólo los choferes de los vehículos sean responsables, sino más bien los propietarios.
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