El estímulo de 30 dólares por barril de crudo que se reconoce en notas de crédito (nocres) a las petroleras permitirá reducir la subvención a los carburantes en 16 millones de dólares este año.
El viceministro de Exploración y Explotación, Eduardo Alarcón, anunció que este año el incentivo sumará 39 millones de dólares, lo que permitirá reducir en 16 millones la subvención.
Sobre el costo y beneficio del incentivo a la producción de hidrocarburos líquidos, el Gobierno espera que éste y el siguiente año sea superior al ahorro en el subsidio.
Sin embargo, a partir de 2014, la situación será distinta, de acuerdo con los datos proporcionados en la audiencia pública del Ministerio de Hidrocarburos. Para 2013, se programa que el estímulo económico sumará 59 millones de dólares, pero permitirá ahorrar 45 millones en el subsidio, detalló Alarcón.
A partir de 2014, el ahorro será mayor que el costo, puesto que el incentivo sumará 70 millones de dólares y el ahorro subirá a 80 millones.
En tanto que para 2016 se proyecta un costo de 103 millones para el aliciente y 169 millones de reducción del costo del subsidio.
El incentivo fue aprobado por un decreto supremo en abril y varias empresas están preparando sus planes de operación para que sean aprobados por YPFB.
Las interesadas son Repsol, YPFB-Chaco, YPFB-Andina, Petrobras Argentina y Matpetrol, que anunciaron la entrega de sus planes de desarrollo para distintos campos. YPFB-Andina trabaja en el plan para los campos petroleros Camiri, Guairuy, La Peña, Arroyo Negro y Los Penocos.
YPFB-Chaco alista los planes para Patujusal, Humberto Suárez y Los Cusis. La española Repsol, para el bloque Mamoré, además de inversiones para Paloma, Surubí Noroeste, Surubí y Surubí Bloque Bajo, y para el área Sur, en Monteagudo y Cambeiti.
El presidente de YPFB Chaco, Rafael Martínez, explicó que este mecanismo de fomento es adecuado porque “hace que la actividad petrolera en busca de líquidos permita una rentabilidad a la empresa”.
La subvención
Sistema Según el Ministerio de Economía, el año pasado la subvención a los carburantes tuvo un costo para el Estado de 663 millones de dólares y para este año el Gobierno presupuestó 755 millones de dólares.
Análisis En diciembre de 2010, el Gobierno trató, sin éxito, de eliminar el subsidio a los carburantes al emitir el decreto supremo 748, que nivelaba al precio del diésel, gasolina y el jet fuel a los que rigen en el mercado internacional, sin tocar el precio del GLP y el GNV. Sin embargo, la medida fue rechazada por la población, y el Gobierno del MAS tuvo que retroceder y abrogar la norma.
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