Recientemente pudimos acceder al Resumen Ejecutivo de una Auditoria Operacional sobre la eficacia, eficiencia y economía de la administración de los recursos IDH en la Gobernación de Pando, sobre el periodo de enero a diciembre de la gestión 2012, ejecutada en cumplimiento del Programa de Operaciones Anual de la gestión 2013 y según una instrucción emitida el 18 de junio de este año 2014. El documento fue emitido el 29 de julio del 2014 por la Dirección de Auditoría Interna de la misma Gobernación de Pando.
Dicha auditoría se propuso evaluar la eficacia, eficiencia y economía del cumplimiento de los objetivos y metas establecidos en el Programa Operativo Anual de la gestión 2012, ejecutados con recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos; así como el cumplimiento de la Normativa respecto al Proceso de Contratación (Normas Básicas del Sistema de Administración de Bienes y Servicios), además de evaluar la documentación de respaldo de los comprobantes contables y si los gastos se encuentran enmarcados en el Decreto Supremo Nº 28421 del Impuesto Directo a los Hidrocarburos IDH.
El informe emitido por Auditoría identificó las siguientes “deficiencias de control interno”:
1.- Inexistencia del reglamento específico del Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP)
2.- No se efectúa el devengamiento del gasto en el periodo
3.- Ingreso de ítems a almacenes con precios diferentes a los facturados
4.- Pagos efectuados previo ingreso a almacenes
5.- No se adjunta documentación original en los comprobantes contables
6.- Falta de objetivos e indicadores de gestión en el plan operativo anual
7.- Incorrecta apropiación de las partidas presupuestarias
8.- Falta de remisión de los informes de conclusión de los proyectos al órgano rector del SNIP.
9.- Plan Estratégico Institucional (PEI) sin aprobación
10.- No se generan informes de seguimiento y evaluación de los proyectos de inversión.
La sola omisión en el cumplimiento de procedimientos establecidos por el Sistema Nacional de Inversión Pública, abre dudas sobre la transparencia, eficiencia, sostenibilidad e impacto social de los recursos del IDH invertidos por la Gobernación de Pando. La unidad de Auditoría no detalló públicamente las obras que fueron ejecutadas en el marco de esa irregularidad administrativa; aunque recomendó los ajustes pertinentes.
Sobre las Regalías y el IDH
Durante los últimos años, el departamento de Pando, uno de los cinco distritos no productores de hidrocarburos en el país, ha recibido los beneficios de la producción petrolera nacional en forma creciente desde el año 2005 cuando se dictó la Ley de Hidrocarburos 3058 estableciendo un Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), adicional a las regalías departamentales que, para Pando y Beni con carácter compensatorio, sólo se limitaba al 1% del total de los ingresos petroleros del país, a diferencia del 6% como regalía para el Tesoro General de la Nación (TGN) y 11% como regalías para los cuatro departamentos productores de hidrocarburos (Chuquisaca, Tarija, Cochabamba y Santa Cruz) junto con Oruro, La Paz y Potosí.
El IDH para los nueve departamentos representa el 32% de la renta petrolera nacional que sumado a las regalías llega al 50% de los ingresos generados por los contratos de explotación petrolera en territorio nacional, cuyas utilidades se destinan asimismo para financiar la Renta Dignidad y el Fondo Indígena.
Un resumen elaborado por la Fundación Jubileo en su informe “IDH y Regalías, aportes para un Diálogo Fiscal” grafica el siguiente esquema de distribución de estos recursos estratégicos en la economía boliviana:
La Ley 981 del 7 de marzo de 1988 fijó una regalía compensatoria del 1% para Pando y Beni, “para contribuir a su desarrollo regional, en igualdad de condiciones con otros departamentos del país”, priorizando la ejecución de obras camineras.
Desde 1988 hasta el año 2004, Pando recibía un promedio anual inferior a los 3 millones de dólares por dicha regalía compensatoria administrada por la Prefectura Departamental; pero a partir del 2005, con la promulgación de la nueva Ley de Hidrocarburos 350 dictada en mayo de ese año para crear el IDH, el departamento amazónico multiplicó sus ingresos llegando a percibir más de 20 millones de dólares de la renta petrolera apenas puesta en vigencia dicha Ley.
El año 2005, Pando percibió $us 5,5 millones de regalía compensatoria, llegando a $us 23,6 millones junto al IDH, mientras que el año 2006 —tras el Decreto de Nacionalización 28701— la regalía compensatoria subió a $us 7,1 millones, sumando $us 49,9 millones con el IDH. En la siguiente gestión, 2007, la regalía compensatoria subió a $us 8,1 millones y con el IDH el ingreso total llegó a un total de $us 54,2 millones. En los siguientes años el incremento fue continuo y sustancial. En la pasada gestión 2013, Pando recibió un total de $us 134,22 de renta petrolera, monto del cual $us 23,3 corresponde a la regalía compensatoria y $us 110,89 al IDH que se distribuye entre las 15 alcaldías del departamento y la Universidad Amazónica de Pando (UAP).
El pasado 17 de febrero, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (Ypfb) publicó una gráfica detallando la evolución creciente de la Regalía Compensatoria y el IDH que recibió el departamento de Pando con destino a su Gobernación, sus municipios y su universidad Pública, entre los años 2005 y 2013:
RegaliasIDHPando
Crisis de fiscalización
En los últimos nueve años, el departamento de Pando ha recibido un total de $us 668,58 millones de la renta petrolera, monto del cual $us 105,39 millones corresponde a la Regalía Compensatoria, mientras que el IDH alcanzó en el mismo periodo a $us 563,19 millones que han sido distribuidos de acuerdo a Ley entre el Gobierno Departamental, los 15 gobiernos municipales del departamento y la Universidad Amazónica de Pando.
Tal como se evidencia mediante el Informe de Auditoría citado al inicio de esta nota, los niveles de control, fiscalización y manejo eficiente de estos importantes recursos adolecen de falencias administrativas y funcionales, destacándose un acceso eficaz a la información del tema. Se ha detectado incluso la carencia de un adecuado control social por parte de representaciones de la sociedad civil cooptada políticamente en Pando.
Se debe reconocer, sin embargo, que a nivel de autoridades nacionales, tanto de YPFB como del Ministerio de Hidrocarburos, la difusión informativa es adecuada y en general accesible para los medios de comunicación y periodistas especializados en el tema.
Durante un Taller de Socialización realizado en la ciudad de Cobija el 16 de febrero de este año, las autoridades nacionales de Ypfb abrieron toda la información disponible sobre la entrega de regalías compensatorias e IDH para Pando; y aunque no se esclareció los destinos de esos montos invertidos previamente a cargo de la Gobernación, las alcaldías y la Universidad pública, se anunció importantes proyectos de inversión en el departamento a partir de este año.
El gerente Nacional de Redes de Gas y Ductos de YPFB, Sergio Borda, reveló que el total de inversión en toda la actividad hidrocarburífera programada en este departamento es de 21,9 millones de dólares.
Detalló que se invertirán 13,6 millones de dólares en la provisión de gas natural por redes a poblaciones intermedias, para uso domiciliario, comercial y Gas Natural Vehicular (GNV), en el marco del proyecto Gas Natural Licuado (GNL), que representa el 62% de la inversión programada en Pando.
‘Vamos a beneficiar a la población de Cobija con 4.000 instalaciones de gas domiciliario. También se distribuirá gas natural a los comercios e industrias y se abastecerá el producto para el GNV en sustitución de la gasolina, en el marco del cambio de la matriz energética’, complementó.
Al no existir gasoductos en Pando y Beni, se implementará el proyecto del gas virtual (GNL) y se destinará 7,5 millones de dólares en actividades de prospección exploratoria en Pando para este año, en la perspectiva de convertirse en un nuevo departamento productor de petróleo.
Se espera que las autoridades departamentales garanticen la transparencia y eficiencia de aquellas inversiones generadas por las regalías y el IDH, cumpliendo las recomendaciones emanadas del Informe de Auditoría concluido el pasado mes de julio.
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