La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) decomisó 706.947 litros de combustible ilegal este año, entre gasolina y diésel, valuados en 6,2 millones de bolivianos, según información provista por su director, Gary Medrano.
Dicha cantidad se alcanzó gracias a los operativos ejecutados por la Dirección de Interdicción de Hidrocarburos (DOIH) de la institución reguladora ejecutados a lo largo de las fronteras de la geografía nacional. De acuerdo con Medrano, hay una reducción considerable del contrabando de combustible, ya que en 2013 la ANH incautó combustible por un valor de casi un millón de bolivianos, mientras que en 2014 fue alrededor de 800 mil.
Según la autoridad, el control que se ejerce desde la instalación del proyecto B-Sisa ha ido acorralando a los contrabandistas, quienes ahora tiene nuevas formas para sacar el combustible subvencionado fuera de nuestras fronteras.
"El B-Sisa es la principal herramienta para detectar el desvío del combustible para fines ilegales que nos permite identificar las zonas y lugares donde existe consumo sospechoso de combustibles como el diésel, gasolina o GLP. Con esa información vamos detectando zonas sensibles para luego hacer un trabajo de inteligencia sobre ellas e identificar a los sospechosos que se dedican a este delito”, agregó.
Explicó que el B-Sisa, al ejercer un control en la venta de combustibles, permite "cerrarle el camino al contrabando, los datos que arroja el proyecto dicen dónde se concentra más la demanda, en qué periodos y con qué frecuencia, y ello nos permite ejercer mayores controles, lo que disuade a quienes se están dedicando a esta actividad”.
Un centenar de operativos
En 2015 fueron cerca de 100 operativos ejecutados por la ANH; la mayoría en la frontera más sensible como es la de occidente, que une a Bolivia con la República del Perú. En esa zona, según el director de la DOIH, Jaime Cuéllar, se realizan operativos constantes, especialmente en la carretera hacia la fronteriza población de Desaguadero, "donde, junto al Comando Conjunto del Plata -a cargo de las Fuerzas Armadas-, cada día se decomisan miles de litros de combustibles, incluso de los tanques adicionales de camiones de carga que llevan gasolina y diésel sin justificar su uso cuando cruzan frontera”.
Sobre la reducción de la incautación en 2015 en comparación con los dos años anteriores, Medrano explicó que esto se debe a la acción de disuasión que ejecuta la ANH en las zonas conflictivas, donde marca presencia y donde ha empezado a utilizar drones para la vigilancia aérea.
Cuéllar indicó que en la última época y como consecuencia de los controles, algunos delincuentes han empezado a querer traficar con el combustible dentro de tanques de gas natural vehicular (GNV) acondicionados para el efecto. Sin embargo, el riguroso control de la ANH ha permitido encontrar este nuevo modo de operar.
Asimismo, se han encontrado vehículos que tenían asientos cortados donde habían incrustado bolsas especiales llenas de gasolina y de diésel que pretendían sacar del país.
En el marco del trabajo de interdicción en un operativo de video vigilancia, ejecutado el 7 de agosto en la ciudad de Villamontes (Tarija), la ANH detuvo un camión cisterna con 10.000 litros de combustible que pretendían trasladar por contrabando al Paraguay. El modo en que operan quienes se dedican a este delito y la cantidad incautada en esa labor ha colocado a esa ciudad en una lista de seis zonas de riesgo por las que podría existir una actividad de tráfico de carburantes ligado, incluso, a grupos del crimen organizado.
Marco normativo
La Unidad de Comunicación Institucional (UCI) de la ANH recuerda que el tráfico ilícito de carburantes está penado por la Ley 100 de Desarrollo y Seguridad Fronteriza, que prohíbe el transporte de combustibles líquidos y gas licuado de petróleo (GLP) en vehículos no autorizados, y almacenar el carburante en tiendas, depósitos o en domicilios particulares.
Además, recordó que el artículo 226 del Código Penal sanciona con la privación de libertad de tres a seis años a las personas que almacenen o comercialicen carburantes sin autorización, además de la confiscación de los bienes e instrumentos para cometer ese delito.
En su momento, la ANH informó que desde 2013 el ente regulador secuestró 250 vehículos utilizados en el tráfico de carburantes. Al ser estos los medios utilizados para cometer el ilícito, se aplica la Ley 100, por lo que pasan a ser incautados y a formar parte de los activos del Estado.
Tarea coordinada
Según Cuéllar, la lucha contra el contrabando de combustibles no sólo es tarea de la ANH, sino también de la Aduana Nacional de Bolivia (ANB), la Policía Nacional y los comandos conjuntos fronterizos conformados por las Fuerzas Armadas, por lo que se trabaja junto a estas instituciones de manera coordinada para desbaratar clanes familiares.
"Una de las tareas en la que trabajamos ahora es la educación de la población, porque además de nuestros operativos de control y decomiso, comunicamos e informamos a la gente, uno, para que no se dedique a esta actividad, y dos, para que la denuncie en caso de conocer datos sobre esta problemática”, aseveró.
El director de la ANH agregó que está vigente la línea gratuita de la institución que es el número 800-10-6006, que en las últimas semanas ha recibido llamadas de varias localidades del país que denuncian la existencia de supuestos clanes que se dedican a mover el combustible fuera de nuestras fronteras.
"Esas informaciones siempre son útiles para nosotros porque nos permiten ir cercando a los delincuentes”, manifestó.
Por ello, pidió a la población que se haga partícipe de la lucha contra el contrabando y denuncie estos ilícitos.
"El combustible que el Estado Plurinacional subvenciona debe ser para los hogares bolivianos, no para gente sin escrúpulos que no piensa que con este ilícito le hace mucho daño al país”, concluyó Medrano.
Durante noviembre, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) incautó más de 1.100 litros de combustible, entre gasolina y diésel oil, en un segundo operativo realizado en el trópico del departamento de Cochabamba, los cuales eran comercializados en bidones a la vereda de la carretera.
La Unidad Distrital de Cochabamba, en coordinación con la Dirección de Operaciones en Interdicción de Hidrocarburos, (DOIH) y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN), realizaron el operativo relámpago de interdicción a la venta ilegal de combustibles comercializada por personas particulares que vendían el producto en diferentes envases plásticos a orillas de la carretera que une a municipios del trópico de Cochabamba.
Los comercializadores ilegales vendían el combustible en envases plásticos que iban desde botellas de dos litros de capacidad hasta un turril de 200 litros.
La modalidad que se ejecutó en el operativo fue la de ubicar y secuestrar: se hallaba la venta ilegal en puestos improvisados y se procedía a su secuestro.
La parte operativa y de inteligencia fue coordinada por el personal de la DOIH, quienes impartieron capacitación sobre medidas de seguridad y equipo de protección previo al operativo. Fueron más de siete vehículos y personal de la ANH, entre técnicos, agentes de la DOIH y personal del área jurídica, los involucrados en esta operación. Por su parte, la FELCN brindó seguridad extra para este movimiento que no presentó incidente alguno. Después, el combustible incautado fue depositado en dependencias de la FELCN, en el municipio de Sacaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario