miércoles, 7 de septiembre de 2016

Trato con Brasil por urea avanza



Las negociaciones sobre precio y volumen para exportar urea a Brasil están “avanzadísimas”, aseguró ayer el ministro de Hidrocarburos, Luis A. Sánchez. Consultado sobre el modo de transporte a falta de la vía férrea retrasada por la rescisión con la china Camce, admitió que el costo aún requiere estudios. Por otra parte, dijo que el clima político no incide en la relación comercial con Brasil.

Sánchez, quien ayer participó de la rendición pública de cuentas del sector eléctrico, dijo que no se conocen los detalles porque se trata de “negociaciones con alto grado de confidencialidad”.

Se prevé que la planta de urea y amoniaco de Bulo Bulo sea entregada en noviembre próximo y que la producción comercial de fertilizantes se inicie en enero de 2017 con 2.100 toneladas métricas de urea granulada por día. De ese total, el Gobierno estima exportar 80 por ciento y destinar 20 por ciento para el mercado interno.

Desde el inicio de obras, en 2013, la ubicación de la planta y la falta de mercados externos fueron los principales cuestionamientos de parte de especialistas.

Sánchez adelantó que en el marco de la agenda energética establecida con Brasil, hace un par de años, se incluye la oferta de que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) sea socio de la planta brasileña de fertilizantes de Tres Lagunas para comercializar la urea de esa planta y la de Bulo Bulo.

Indicó que Brasil tiene un déficit de urea de 60 por ciento, es decir que toda la producción podría tener a Brasil como mercado. También, dijo, hay la posibilidad de exportarla a Argentina y Paraguay.

Sánchez recordó que hay mercado interno asegurado para el 20 por ciento de la producción, pues entre los objetivos fundamentales del proyecto está que los cultivos sean más eficientes para dejar de importar y que se amplíe la frontera agrícola.

Respecto a la ubicación, defendió que el proyecto cuenta con todos los estudios de mercados, precio, ubicación y costos.

La ferrovía Bulo Bulo-Montero fue concebida para trasladar la urea hacia Brasil, pero su avance se frustró por problemas con las constructoras adjudicatarias, entre ellas la china Camce, y con la nueva licitación, lanzada la semana pasada, se prevé que esté concluida en un año y medio. Mientras, la urea será transportada por tierra, dijo hace poco el ministro de Obras Públicas, Milton Claros.

Al respecto, Sánchez dijo que estos proyectos “llevan tiempo” e hizo notar que la de Bolivia es la única petroquímica concluida en Sudamérica.



LA AGENDA ENERGÉTICA CON BRASIL ABARCA MÁS QUE GAS

El ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis A. Sánchez, manifestó ayer que, desde 2015, Bolivia y Brasil trabajan una agenda energética que, básicamente, incluye la ampliación del contrato de compra y venta de gas a partir de 2019 a la estatal Petrobras, aunque también hay interés de parte de empresas privadas; analizar la posibilidad de integración energética y hacer inversiones en proyectos conjuntos como la hidroeléctrica del Río Madera, una binacional que generará más de 3.000 megavatios (MW) y sobre la que se acordó que el 50 por ciento aporte la estatal Eletrobras de Brasil y ENDE, de Bolivia. Además, dijo, Petrobras también está interesa en exploración hidrocarburífera en Bolivia

“Hemos avanzado muchísimo los últimos dos años. Hubo encuentros en Brasil y Bolivia, reuniones técnicas constantes”, dijo Sánchez y ratificó la llegada a La Paz de una delegación de Brasil para continuar negociaciones este 19 de septiembre.

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