El presidente interino de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Santos Ramírez Valverde, posesionó ayer a Gary Dáher como flamante titular de la nacionalizada Transredes, luego de que el gobierno de Evo Morales determinó comprar todas las acciones de esta empresa.
Ramírez comprometió a la nueva autoridad a cumplir la normativa de la nacionalización de los hidrocarburos y principalmente abocarse al Decreto Supremo 29586, el cual establece la nacionalización de esta empresa transportadora.
CONSPIRAR
Por su parte, el Primer Mandatario, en su discurso, acusó a las empresas Enron Transportadora Holdings Ltda. y a la Ashmore Energy Internacional filial de TR-Holdings en Bolivia de haber impulsado un plan conspirativo en contra de su gobierno.
“Saben los ministros, he soportado desde el 2006 esta conspiración (...) también la paciencia tiene un límite, y no vamos ha permitir que otras empresas estén conspirando como la Enron o Ashmore”, afirmó Morales.
“Que vengan a trabajar y no a conspirar”, insistió el Mandatario al afirmar que el Gobierno acompañado de los movimientos sociales, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional serán las “yuntas” que garantizarán el proceso de cambio y la recuperación de las empresas y los recursos naturales.
Afirmó que las empresas transnacionales que quieran invertir en el país, respetando las normas bolivianas, se les garantiza la seguridad jurídica y sus ganancias.
El Gobierno boliviano había promulgado, el pasado 1 de mayo, el Decreto Supremo Nro. 29541 por el que se adquirió para Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) las acciones suficientes para controlar el 50 por ciento más 1 de las acciones en las petroleras Andina, Chaco y Transredes.
TR Holdings, sociedad suscrita en partes iguales entre Enron Transportadora Holdings Ltda. y Shell Gas (Latin América), fue nacionalizada con el Decreto Supremo Nro. 29586, y tenían el 50 por ciento de Transredes.
La medida se toma, en cumplimiento del primer decreto, cuando el Gobierno ordenó por decreto la transferencia al Estado de las acciones de Transredes, Chaco (BP) y el 100% de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLHB) de capitales alemanes y peruanos.
Además, las autoridades nacionales garantizaron las inversiones necesarias para cumplir, por ejemplo, con los acuerdos de integración energética con Buenos Aires, para el suministro desde 14 millones de m3 de gas diarios, a partir de 2010, hasta 27 millones durante los 20 años de duración del convenio.
Ramírez comprometió a la nueva autoridad a cumplir la normativa de la nacionalización de los hidrocarburos y principalmente abocarse al Decreto Supremo 29586, el cual establece la nacionalización de esta empresa transportadora.
CONSPIRAR
Por su parte, el Primer Mandatario, en su discurso, acusó a las empresas Enron Transportadora Holdings Ltda. y a la Ashmore Energy Internacional filial de TR-Holdings en Bolivia de haber impulsado un plan conspirativo en contra de su gobierno.
“Saben los ministros, he soportado desde el 2006 esta conspiración (...) también la paciencia tiene un límite, y no vamos ha permitir que otras empresas estén conspirando como la Enron o Ashmore”, afirmó Morales.
“Que vengan a trabajar y no a conspirar”, insistió el Mandatario al afirmar que el Gobierno acompañado de los movimientos sociales, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional serán las “yuntas” que garantizarán el proceso de cambio y la recuperación de las empresas y los recursos naturales.
Afirmó que las empresas transnacionales que quieran invertir en el país, respetando las normas bolivianas, se les garantiza la seguridad jurídica y sus ganancias.
El Gobierno boliviano había promulgado, el pasado 1 de mayo, el Decreto Supremo Nro. 29541 por el que se adquirió para Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) las acciones suficientes para controlar el 50 por ciento más 1 de las acciones en las petroleras Andina, Chaco y Transredes.
TR Holdings, sociedad suscrita en partes iguales entre Enron Transportadora Holdings Ltda. y Shell Gas (Latin América), fue nacionalizada con el Decreto Supremo Nro. 29586, y tenían el 50 por ciento de Transredes.
La medida se toma, en cumplimiento del primer decreto, cuando el Gobierno ordenó por decreto la transferencia al Estado de las acciones de Transredes, Chaco (BP) y el 100% de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLHB) de capitales alemanes y peruanos.
Además, las autoridades nacionales garantizaron las inversiones necesarias para cumplir, por ejemplo, con los acuerdos de integración energética con Buenos Aires, para el suministro desde 14 millones de m3 de gas diarios, a partir de 2010, hasta 27 millones durante los 20 años de duración del convenio.
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