El presidente Evo Morales ratificó ayer en el cargo al ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, y anunció que no modificará su política energética, tras la censura que sufrió la autoridad en la prestación de un informe oral en la Cámara de Senadores sobre la venta de gas natural a Argentina.
La Cámara Alta reprobó la noche del jueves a Villegas por reducción de envíos de gas al país vecino (cerca de un 75 por ciento de lo pactado en el contrato) y la falta de inversiones destinadas a fortalecer a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
Según la agencia Efe, en un acto celebrado en Chuquisaca, el Primer Mandatario anunció que ratificará a Villegas en el cargo. Justificó su permanencia en que la censura sólo apunta a atacar el proceso de nacionalización iniciado el 1 de mayo de 2006.
“Nuestro ministro Villegas fue censurado por ex adenistas, ahora de Podemos, por emenerristas. En el fondo censuran la nacionalización de los hidrocarburos. Imagínense semejantes antipatrias y vendepatrias vendidos a las transnacionales”.
Según Morales, estos partidos de oposición impulsaron en el pasado la capitalización y privatización de las empresas públicas del país e hicieron negocios en su favor y no del pueblo.
La Constitución Política del Estado (CPE), en su artículo 70 párrafo III, señala que la censura tiene por finalidad la modificación de las políticas gubernamentales e implica la renuncia de la autoridad interpelada, la cual puede ser aceptada o rechazada por el Presidente.
La ministra de Planificación para el Desarrollo, Graciela Toro, aseguró ayer que Villegas cuenta con el respaldo del Poder Ejecutivo y adelantó que la política energética se mantendrá como está.
El Gobierno se fijó como prioridad el abastecimiento de carburantes en el mercado interno y garantizar el contrato de venta de gas a Brasil y Argentina.
Bolivia se comprometió a enviar este año 7,7 millones de metros cúbicos de gas natural a Argentina y subir el volumen de forma gradual hasta los 27,7 millones en 2027. Para esta gestión, las partes acordaron una entrega de al menos 4,6 millones de metros cúbicos diarios, pero tampoco se cumple porque el actual envío ronda los dos millones debido a la limitada producción atribuida por el Gobierno a las bajas inversiones.
Bolivia llegó a un pacto político con el país vecino para que no sea sujeta a penalidades por las entregas. Sin embargo, según los diarios bonaerenses, el Gobierno de Cristina Fernández es presionado para la aplicación de multas dado que, en virtud del incumplimiento de Bolivia, tiene que adquirir gas natural licuado de Trinidad y Tobago.
Para superar aquella situación, Bolivia acordó con Argentina revisar el contrato y aplicar una adenda con nuevos volúmenes y plazos. Esto está en negociación con los técnicos.
Por otro lado, el presidente de YPFB, Santos Ramírez, informó a Erbol que esta semana se reunirá con ejecutivos de Enarsa para garantizar la construcción del Gasoducto al Noreste Argentino (GNEA) y ajustar el cronograma de construcción.
Ese gasoducto es importante porque a través de él se suministrará más energía a esa nación, especialmente a las provincias del norte, hasta el año 2027.
YPFB y Enarsa ya licitaron la construcción de la infraestructura y ahora está en proceso.
Envian más GLP a Santa Cruz
El Gobierno enviará más gas licuado de petróleo a Santa Cruz para garantizar el abastecimiento, pero reducirá la oferta en La Paz debido a que no se afrontan problemas.
El superintendente de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, informó a la red televisiva ATB que los bloqueos suscitados en Santa Rosa del Sara ocasionaron un desfase en la provisión a la región oriental.
Sin embargo, ahora se subirá la oferta de 32.000 a 38.000 garrafas por día. En La Paz, la distribución bajará de 42.000 a 38.000 garrafas porque se tiene garantizada la provisión a todas las zonas con normalidad.
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