viernes, 12 de febrero de 2016

Crudo cae a menor valor desde 2003

El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI, de referencia para Bolivia) bajó ayer un 4,52 por ciento y cerró en 26,21 dólares el barril, un nuevo mínimo anual y el valor más bajo desde mayo de 2003.

El descenso y la preocupación por la situación de la economía global provocaron que las bolsas mundiales volvieran a derrumbarse con caídas abismales en el sector bancario.

El desplome del valor del crudo fue atribuido, una vez más, al exceso de oferta en el mercado que se lleva arrastrando desde 2014 y que se prevé se alargará.

Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del petróleo WTI para entrega en marzo, los de más próximo vencimiento, cedieron 1,24 dólares respecto al cierre anterior. En el mercado de Londres, el barril de Brent bajó 78 centavos a 30,06 dólares.

La sobreoferta viene generando un desplome en los precios internacionales del crudo desde el segundo semestre de ese año.

La idea quedó reforzada con informes que dan cuenta de un nuevo ascenso en los últimos días, en 550.000 barriles, en las reservas del “hub” de Cushing, en el estado de Oklahoma, el mayor del país.

El miércoles pasado, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) informó que el cártel energético aumentó el mes pasado su producción en 130.000 barriles diarios, con una producción total del grupo de 32,33 millones, por encima de los 30 millones que se ha fijado como tope nominal.

El precio de ayer del crudo WTI, el crudo de referencia en Estados Unidos, supera al valor de 26,55 dólares, el anterior mínimo anual, anotado el pasado 20 de enero.

Hay que remontarse al 6 de mayo de 2003 para hallar un precio menor al registrado ayer, 25,72 dólares el barril, aunque al día siguiente tuvo un ligero repunte y acabó en 26,23 dólares.

Por su parte, los contratos de gasolina para entrega en marzo quedaron prácticamente igual que el miércoles, en 0,94 dólares el galón, mientras los de gasóleo de calefacción con vencimiento ese mismo mes subieron 0,4 centavos y quedaron en 0,98 dólares.

Finalmente, los contratos de gas natural para entrega en marzo bajaron 5 centavos y quedaron en 1,99 dólares por cada mil pies cúbicos.

“Enfrentamos una tendencia negativa general de la economía mundial”, dijo Carl Larry de la firma Frost & Sullivan. “La recuperación se hace esperar en todo el mundo y eso presiona al petróleo”, añadió.

“Mientras la economía esté debilitada y la demanda sea baja, el mercado petrolero seguirá en bajos niveles”, insistió.

Como ejemplo de la inquietud, mencionó la nueva caída de las plazas bursátiles, que perdieron entre 2 y 4 por ciento en Asia, Europa y Estados Unidos.

“Dado que los inversores temen una recesión, los mercados del petróleo están bajo presión al igual que las bolsas, las obligaciones y las monedas”, apuntó Tim Evans, de Citi.



TERREMOTO BANCARIO Y CAÍDA DE BOLSAS

Las bolsas mundiales volvieron a derrumbarse ayer, con caídas abismales en el sector bancario, por preocupaciones sobre el precio del petróleo y la situación de la economía mundial.

En Europa, Londres perdió 2,39 por ciento, Fráncfort 2,93 y París 4,05 por ciento. Las caídas fueron aún más pronunciadas en Madrid, que cayó 4,88 por ciento, y Milán que se hundió en 5,63 por ciento.

Wall Street también se sacudió. El Dow Jones perdió 1,60 por ciento, el S&P500 1,23 y el Nasdaq 0,39. La bolsa de Sao Paulo, la mayor de América Latina, perdió 2,56 y la de Buenos Aires 2,96 por ciento.

Además, el hundimiento parece imparable en el sector financiero. “Es un terremoto bancario”, afirmaron varios medios alemanes.

En Francia, Société Générale retrocedió 12,57 por ciento y BNP Paribas 6,02. En Italia, Ubi Banka, 12,11, y BMPS 9,88, en tanto que en España Bankia se desplomaba 7,64 y BBVA 7,14 por ciento. El alemán, Deutsche Bank volvió a hundirse, perdiendo 6,14 por ciento. En la “City” de Londres, el Barclays perdió 7,01 por ciento y Standard Chatered 5,09 por ciento.

El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, consideró sin embargo que los bancos de la zona euro están actualmente “en mejor situación que hace unos años”.

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