En el primer trimestre de este año, la subvención de los combustibles en Bolivia subió en 28% con relación a similar periodo de 2012. Este incremento se debe a una mayor demanda de gasolina especial y diésel oil en la actividad productiva.
Esta información, a la que accedió La Razón, corresponde al Viceministerio de Industrialización, Comercialización, Transporte y Almacenaje de Hidrocarburos. En el documento se destaca que el dinamismo en el consumo de combustibles es impulsado por la maquinaria del sector agrícola.
En el primer trimestre de 2012, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) destinó Bs 940,44 millones y para el mismo lapso de tiempo de este año desembolsó Bs 1.199,36 millones, lo que muestra que la petrolera estatal gastó Bs 258,92 millones más que el año pasado (ver infografía).
Con relación al Gas Licuado de Petróleo (GLP), el reporte señala que el resultado de la ampliación de las refinerías Gualberto Villarroel en Cochabamba y Guillermo Elder Bell en Santa Cruz, y el aumento de producción de gas natural en varios campos, permitió que desde diciembre de 2012 Bolivia cubra su demanda interna, pero además pueda exportar sus excedentes al exterior.
El 27 de noviembre de 2012 La Razón informó que desde ese mes la producción de GLP abastece la demanda interna, lo que permitirá destinar el excedente de 1.000 toneladas métricas (TM) a mercados externos de la región. La petrolera estatal informó que a partir de junio Bolivia producirá 5.000 TM de GLP en la Planta Separadora de Líquidos Río Grande, en Santa Cruz.
En el primer trimestre de esta gestión, con relación al mismo periodo de 2012, el consumo de carburantes como el diésel oil y la gasolina especial sufrió un incremento del 8,62% y 11,07% respectivamente, en tanto que el consumo de GLP se redujo en un 2,36% debido a la instalación de redes domiciliarias de gas natural en todo el país, explica el documento.
Cifras. De enero a marzo de 2013, las ciudades de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz fueron las que demandaron más del 70% de los combustibles líquidos (gasolina especial, diésel oil y GLP). La proyección de subvención de combustibles y la estimación de la demanda en el país para todo este año, en el caso del diésel, será de Bs 4.177 millones, señala el informe del Viceministerio de Industrialización, Comercialización, Transporte y Almacenaje de Hidrocarburos.
Para la compra de insumos y aditivos que permitan elevar el octanaje de la gasolina blanca para obtener gasolina especial, el Estado boliviano destinará Bs 1.373 millones, añade el informe.
El 15 de diciembre de 2012, el vicepresidente Álvaro García dijo que por cada litro de combustible comercializado en el país se destina $us 1 a la subvención. El litro de gasolina cuesta Bs 3,74 y el de diésel, Bs 3,72. En el Presupuesto General del Estado (PGE) 2013 se destinó $us 1.060 millones para el subsidio de diésel oil, GLP y gasolina especial.
Guillermo Torres Orías: El consumo es grande y derrochador
Hay muchos carros en el país, lo que representa un consumo muy grande y derrochador. La gente consume en función de lo que le toca el bolsillo, y obviamente con precios tan bajos del litro de diésel y de la gasolina, éstos resultan ser la tercera parte de lo que significa por ejemplo un litro de agua, azúcar y edulcorante (sic).
Las personas también tienen automóviles baratos, porque hay muchos vehículos chutos o usados que se han contrabandeado en el país. Todas las ciudades de Bolivia están llenas de aquellos coches, y el tráfico se vuelve muy pesado. Con esta cantidad de motorizados el consumo se vuelve grande.
Ahora, para el primer trimestre de este año, el Gobierno atribuye el aumento del consumo de combustibles a la frontera agrícola porque, seguramente, se ha hecho la preparación de la siembra y la cosecha, y los equipos que se usan para estas tareas usan diésel en su mayoría.
Lo que deberían tener las autoridades (del Órgano Ejecutivo) son datos exactos de la frontera agrícola y su relación con el consumo de combustibles. Los departamentos más consumidores de diésel son sobre todo La Paz y Santa Cruz, entonces esa información la deberían tener las autoridades de manera separada.
No creo que el Gobierno tenga los datos de cuánto se está contrabandeando. Si nosotros tenemos una producción nacional y no conocemos el contrabando, entonces no sabemos cuánto es el consumo interno y encima de esto están los automóviles chutos y el bajo precio.
Guillermo Torres Orías es exministro de Hidrocarburos.
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