Según la reguladora, La Paz consume de 750.000 a 800.000 litros de gasolina por día.
La escasez de gasolina se extendió ayer a los surtidores de La Paz y Cochabamba, aunque la Superintendencia de Hidrocarburos aseguró que la provisión es normal con excepción de los días lunes y en Santa Cruz por los conflictos de hace dos meses.
En La Paz se observaron largas filas de automóviles en las estaciones de servicio de la avenida Busch, de la Kantutani y otros en busca de aprovisionarse de gasolina.
El diario Los Tiempos de Cochabamba también constató el mismo problema por la demanda de diésel.
La Asociación de Surtidores (Asosur) atribuyó el desabastecimiento al racionamiento que impone Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) hace tres meses y al desfase que se ocasiona por la no entrega del combustible los fines de semana en la planta de Senkata.
El presidente de Asosur, Mauricio Béjar, dijo que la estatal redujo las asignaciones a las estaciones de entre 12.000 y 4.000 litros por semana.
El superintendente de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, negó la disminución de volúmenes de gasolina que se entregan a las estaciones de servicio en La Paz. “Normalmente se abastecen con 750.000 a 800.000 litros diarios”.
Sin embargo, admitió que los días lunes siempre se presenta un desfase porque no se efectúan entregas a los surtidores el fin de semana.
La autoridad informó que se analizan tres soluciones: que la planta de almacenaje atienda los días domingos, que se duplique la distribución los sábados o, en su defecto, que los lunes se atienda a partir de la una de la madrugada.
El superintendente cree además que detrás de las denuncias de Asosur existen “móviles políticos” que pretenden desacreditar la nacionalización.
En ese sentido, anunció que habrá operativos sorpresa en las 500 estaciones de servicio que existen en todo el país, con el objetivo de verificar que no haya ocultamiento de gasolina, como sucedió en Santa Cruz en algunas gasolineras.
Si se verifica esta situación adelantó que habrá sanciones económicas o cierre temporal.
Aruquipa recordó que sólo hay desabastecimiento en Santa Cruz debido a que la toma de instalaciones de YPFB y los bloqueos de caminos impidieron un normal suministro que hasta ahora no se restablece.
El Superintendente justificó la escasez en Cochabamba debido a que el transporte pesado cruceño prefiere abastecerse en esa ciudad.
La venta de GLP volverá a barrios
La Superintendencia de Hidrocarburos busca retornar al antiguo sistema de venta de gas licuado de petróleo (GLP), para que los camiones distribuidores recorran calles y avenidas de todas las zonas paceñas, dejando atrás los puntos de comercialización. Esto para evitar que sigan presentándose problemas de escasez del carburante en algunos distritos de la ciudad.
El superintendente de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, anunció que de lunes a viernes los camiones distribuidores atenderán en esos lugares sólo de 06.00 a 08.00 y a partir de las 08.30 se trasladarán a los barrios de La Paz. Mientras que los días sábados la distribución será exclusivamente en las zonas y bajo ninguna circunstancia en lugares fijos, “así bloqueen las calles”.
La autoridad reguladora lamentó que persista la resistencia de algunos distribuidores de GLP a hacer su recorrido por las zonas, con el argumento de que la comisión que reciben por venta no solventa el gasto en gasolina y por la difícil topografía.
Al respecto, dijo que se están aplicando sanciones, como multas económicas o la suspensión temporal de la licencia de operación a los distribuidores. En La Paz existen 17 empresas de distribución, de las que el 70 por ciento fue sancionado.
La escasez de gasolina se extendió ayer a los surtidores de La Paz y Cochabamba, aunque la Superintendencia de Hidrocarburos aseguró que la provisión es normal con excepción de los días lunes y en Santa Cruz por los conflictos de hace dos meses.
En La Paz se observaron largas filas de automóviles en las estaciones de servicio de la avenida Busch, de la Kantutani y otros en busca de aprovisionarse de gasolina.
El diario Los Tiempos de Cochabamba también constató el mismo problema por la demanda de diésel.
La Asociación de Surtidores (Asosur) atribuyó el desabastecimiento al racionamiento que impone Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) hace tres meses y al desfase que se ocasiona por la no entrega del combustible los fines de semana en la planta de Senkata.
El presidente de Asosur, Mauricio Béjar, dijo que la estatal redujo las asignaciones a las estaciones de entre 12.000 y 4.000 litros por semana.
El superintendente de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, negó la disminución de volúmenes de gasolina que se entregan a las estaciones de servicio en La Paz. “Normalmente se abastecen con 750.000 a 800.000 litros diarios”.
Sin embargo, admitió que los días lunes siempre se presenta un desfase porque no se efectúan entregas a los surtidores el fin de semana.
La autoridad informó que se analizan tres soluciones: que la planta de almacenaje atienda los días domingos, que se duplique la distribución los sábados o, en su defecto, que los lunes se atienda a partir de la una de la madrugada.
El superintendente cree además que detrás de las denuncias de Asosur existen “móviles políticos” que pretenden desacreditar la nacionalización.
En ese sentido, anunció que habrá operativos sorpresa en las 500 estaciones de servicio que existen en todo el país, con el objetivo de verificar que no haya ocultamiento de gasolina, como sucedió en Santa Cruz en algunas gasolineras.
Si se verifica esta situación adelantó que habrá sanciones económicas o cierre temporal.
Aruquipa recordó que sólo hay desabastecimiento en Santa Cruz debido a que la toma de instalaciones de YPFB y los bloqueos de caminos impidieron un normal suministro que hasta ahora no se restablece.
El Superintendente justificó la escasez en Cochabamba debido a que el transporte pesado cruceño prefiere abastecerse en esa ciudad.
La venta de GLP volverá a barrios
La Superintendencia de Hidrocarburos busca retornar al antiguo sistema de venta de gas licuado de petróleo (GLP), para que los camiones distribuidores recorran calles y avenidas de todas las zonas paceñas, dejando atrás los puntos de comercialización. Esto para evitar que sigan presentándose problemas de escasez del carburante en algunos distritos de la ciudad.
El superintendente de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, anunció que de lunes a viernes los camiones distribuidores atenderán en esos lugares sólo de 06.00 a 08.00 y a partir de las 08.30 se trasladarán a los barrios de La Paz. Mientras que los días sábados la distribución será exclusivamente en las zonas y bajo ninguna circunstancia en lugares fijos, “así bloqueen las calles”.
La autoridad reguladora lamentó que persista la resistencia de algunos distribuidores de GLP a hacer su recorrido por las zonas, con el argumento de que la comisión que reciben por venta no solventa el gasto en gasolina y por la difícil topografía.
Al respecto, dijo que se están aplicando sanciones, como multas económicas o la suspensión temporal de la licencia de operación a los distribuidores. En La Paz existen 17 empresas de distribución, de las que el 70 por ciento fue sancionado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario