Incautación de diésel en 2013 superó los 2,6 MM de litros

Los Comandos Conjuntos de las Fuerzas Armadas y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) decomisaron el año pasado 2,69 millones de litros de diésel por un valor de Bs 10,01 millones. Los primeros incautaron el 91% del carburante.

En 2012, la ANH y las FFAA decomisaron en conjunto aproximadamente 1 millón de litros de combustible líquido, detuvo a 120 personas y se incautó de 150 vehículos utilizados en actos ilícitos relacionados con el contrabando de diésel y gasolina.

La ANH, a través de la Dirección de Operaciones de Interdicción de Hidrocarburos (DOIH) y en trabajo coordinado con los Comandos Conjuntos de las Fuerzas Armadas, comisó en 2013 un total de 2,77 millones de litros de carburantes (diésel, gasolina y querosén).

Combustibles. En el caso de la gasolina especial, los decomisos llegaron a 63.930 litros y de querosén a 14.984. Estas cifras corresponden solo al 2,8% del total de lo incautado durante toda la gestión 2013.

En una anterior entrevista, el director de Operaciones de Interdicción de Hidrocarburos de la entidad reguladora, Jaime Cuéllar, dijo a La Razón que los contrabandistas utilizan todas las fronteras para sacar los combustibles. Reveló que una de las principales rutas es Desaguadero, que conecta con el Perú.

Explicó que en esa región existen “grandes grupos familiares” dedicados al contrabando hormiga de carburantes. “Hay muchas personas implicadas en este caso. Esta es una frontera muy peligrosa en el tema del contrabando de combustibles, es un sangrado muy fuerte para la economía boliviana”, afirmó.

En 2013, la subvención al diésel, gasolina y GLP estaba calculada en $us 1.066 millones. En 2012 fue de 981 millones y en 2011 el Presupuesto General del Estado (PGE) destinó $us 666 millones para esa partida. Para 2014, la subvención se reducirá a $us 900 millones gracias a la extracción de licuables en la Planta de Separación de Líquidos Río Grande (Santa Cruz).

La Ley de Desarrollo y Seguridad de las Fronteras establece que el combustible incautado se transfiere a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). La ANH conformó, a través de una resolución administrativa interna, la DOIH que tendrá a su cargo a un grupo operativo de efectivos compuesto por miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana para ejecutar acciones contra el desvío de carburantes en cualquier punto del territorio.