Los surtidores de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) no serán cerrados de forma definitiva si no emiten facturas, como sucede con las estaciones privadas, y sólo despedirán a los funcionarios infractores.
Esta decisión del Gobierno surge, pese a que los dueños de surtidores presentaron ante el Ministerio Público un recurso por discriminación contra el Gobierno por la Ley 100.
“Si en un surtidor estatal un funcionario no entregó factura, se lo despide y se lo enjuicia, pero debe seguir funcionando el surtidor las 24 horas; si un surtidor privado no entrega facturas, no cumple con la legalidad, se tiene que quitar la licencia y ver la manera de que ese surtidor siga proveyendo combustible”, puntualizó el vicepresidente del Estado, Álvaro García Linera.
Las declaraciones del mandatario surgen luego de que la Asociación de Propietarios de Surtidores de Bolivia (Asosur) presentara el martes un recurso por discriminación contra los autores de la Ley 100 ante la Fiscalía de Distrito de La Paz.
Su presidenta, Sussy Dorado, explicó a Página Siete que “la ley impositiva para el resto de los contribuyentes penaliza la no emisión de notas fiscales con una multa de diez veces el monto no facturado, más tres días de clausura, pero para el sector minorista de hidrocarburos es un cierre definitivo a la primera no emisión de factura; entonces estamos siendo discriminados por la ley, no existe igualdad”.
García Linera diferenció ayer a las estaciones de servicio de YPFB de las privadas, alegó que “no hay discriminación porque el surtidor privado genera riqueza para el dueño; cuando el Estado gana, esa ganancia se convierte en escuela, carretera y hospital, no es ganancia del Presidente, por lo tanto, no están en la misma situación un surtidor estatal y un privado”.
El 15 de julio, el presidente Evo Morales fue enfático cuando señaló la obligación que tienen las estaciones, incluso de YPFB, de entregar facturas. “Nuestros compañeros que trabajan en estas estaciones de servicio (de YPFB), la primera tarea es que sean sanos, honestos, responsables y que se facture”, remarcó en la inauguración de dos surtidores de YPFB en las zonas de Calacoto y San Pedro.
El artículo 19 de la Ley 100 incorpora al artículo 164 del Código Tributario Boliviano el parágrafo V, que establece: “Cuando se verifique la no emisión de factura, nota fiscal o documento equivalente por la venta de gasolinas, diésel oil y gas natural vehicular en estaciones de servicio autorizadas por la entidad competente, la sanción consistirá en la clausura definitiva del establecimiento”.
Surtidores YPFB
En planes El Gobierno planifica que hasta fin de año haya 36 estaciones de servicio de YPFB en todo el país.
En funcionamiento Hasta ahora hay 25 surtidores de la estatal petrolera en todo el territorio nacional.
Costo La construcción de cada surtidor cuesta en promedio 350 mil bolivianos.
Objetivo El Gobierno tiene planificado que con estaciones propias se termine el contrabando de combustibles.
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