La empresa petrolera Chaco comenzó ayer a procesar gas natural y con ello el país aumentó su producción total del energético, pero los mercados externos, Brasil y Argentina, redujeron sus demandas, dejando con excedente de 8,5 millones de metros cúbicos diarios (MMmcd) a Bolivia.
Desde ayer el país aumentó su capacidad de producción de gas, de 42 a 42,5 MMmcd, debido a que el campo Percheles de Chaco anunció una producción inicial de 15 millones de pies cúbicos diarios de gas (0,5 MMmcd) y con una capacidad nominal de producir algo más de 1 MMmcd próximamente.
La planta Percheles, donde se invirtieron 64 millones de dólares, ahora entrega su producción a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que es la que se encarga del destino de este volumen de gas, que puede ser entregado al mercado interno o a la exportación, explicaron en la empresa Chaco.
Sin embargo, la demanda del gas producido en el país bajó en el mercado brasileño de 31 a 24 MMmcd, y en el argentino de 6,2 a 1,2 MMmcd, quedando actualmente un excedente de aproximadamente 8,5 MMmcd, que está obligando al Gobierno a cerrar algunas válvulas y dejar de producir el energético, y reinyectar otra parte del gas, para rescatar los líquidos y abastecer de combustibles al mercado interno, según informaron fuentes del Ministerio de Hidrocarburos.
Brasil bajó su demanda de gas debido a que cerró algunas de sus plantas generadoras termoeléctricas para sustituirlas por las hídricas, debido a que el vecino país pudo almacenar bastante agua, gracias a la caída de continuas lluvias. Por otra parte, la crisis y las vacaciones en las industrias también afectaron en la reducción del consumo de gas.
Argentina está importando menos gas (1,2 MMmcd) del comprometido (7 MMmcd), debido a conflictos laborales que terminaron en un paro de sus trabajadores petroleros, que impiden las operaciones del principal gasoducto por donde interna gas boliviano. Además, la demanda de ese mercado cayó también por la crisis que afecta a la industria y porque se está viviendo una temporada de calor, que reduce el alto consumo de gas que se presenta en el invierno.
Ante esta situación, el ex superintendente de Hidrocarburos Hugo de la Fuente indicó ayer a La Razón que “aumentar la producción, en otras circunstancias, hubiese sido muy buena noticia”.
“Ahora que Argentina (al igual que Brasil) también está pidiendo menos gas de lo que había adelantado, preocupa a todos, porque no tenemos la infraestructura de reinyección, donde el Gobierno debería empezar a trabajar”, añadió.
Para el ex ministro del sector Álvaro Ríos, el Gobierno pasa por todos estos problemas debido a que YPFB no cuenta con una “unidad de inteligencia”, como otras empresas, que prevea lo que ocurre en los mercados vecinos. Pero considera que la producción de Percheles es bienvenida, porque la reducción de consumo de gas es coyuntural y durará de tres a seis meses.
“El Gobierno tiene ignorancia de lo que está ocurriendo en los mercados vecinos, por lo que debe tener esta unidad para no pasar las vergüenzas que está pasando, de conocer todo a último momento”, sostuvo.
Ambos analistas recomiendan la diversificación de mercados y la producción de LNG (gas líquido), para evitar más problemas.
Todavía no se firmó con TBS
El contrato con la empresa Transborder Service Gas (TBS), para exportar gas natural a la generadora de electricidad de Cuiabá en Brasil, todavía no fue firmada, debido a que se requiere de la aprobación del Gobierno brasileño, informó ayer el viceministro de Desarrollo energético, Misael Gemio.
Aunque las negociaciones se encuentran bastante avanzadas y ya existe un acuerdo, la firma depende de la aprobación del Gobierno de Brasil para la reanudación del suministro de termoelectricidad y del visto bueno de los socios de la TBS, explicó la autoridad, en la ciudad de Santa Cruz.
Bolivia tiene un excedente de 2,2 millones de metros cúbicos diarios (MMmcd) de gas para exportar a Cuiabá, hasta mayo, mes en que San Paulo (Brasil) volverá a incremenrtar su demanda.
´Estamos haciendo esfuerzos para programar el volumen mínimo en firme (fijo)” , que será de 0.7 MMmcd, que requiere la generadora de Cuiabá para mantenerse en funcionamiento.
La paralización de las operaciones de la generadora inclusive ha generado discusión legal en Brasil, manifestó Gemio.
Desde ayer el país aumentó su capacidad de producción de gas, de 42 a 42,5 MMmcd, debido a que el campo Percheles de Chaco anunció una producción inicial de 15 millones de pies cúbicos diarios de gas (0,5 MMmcd) y con una capacidad nominal de producir algo más de 1 MMmcd próximamente.
La planta Percheles, donde se invirtieron 64 millones de dólares, ahora entrega su producción a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), que es la que se encarga del destino de este volumen de gas, que puede ser entregado al mercado interno o a la exportación, explicaron en la empresa Chaco.
Sin embargo, la demanda del gas producido en el país bajó en el mercado brasileño de 31 a 24 MMmcd, y en el argentino de 6,2 a 1,2 MMmcd, quedando actualmente un excedente de aproximadamente 8,5 MMmcd, que está obligando al Gobierno a cerrar algunas válvulas y dejar de producir el energético, y reinyectar otra parte del gas, para rescatar los líquidos y abastecer de combustibles al mercado interno, según informaron fuentes del Ministerio de Hidrocarburos.
Brasil bajó su demanda de gas debido a que cerró algunas de sus plantas generadoras termoeléctricas para sustituirlas por las hídricas, debido a que el vecino país pudo almacenar bastante agua, gracias a la caída de continuas lluvias. Por otra parte, la crisis y las vacaciones en las industrias también afectaron en la reducción del consumo de gas.
Argentina está importando menos gas (1,2 MMmcd) del comprometido (7 MMmcd), debido a conflictos laborales que terminaron en un paro de sus trabajadores petroleros, que impiden las operaciones del principal gasoducto por donde interna gas boliviano. Además, la demanda de ese mercado cayó también por la crisis que afecta a la industria y porque se está viviendo una temporada de calor, que reduce el alto consumo de gas que se presenta en el invierno.
Ante esta situación, el ex superintendente de Hidrocarburos Hugo de la Fuente indicó ayer a La Razón que “aumentar la producción, en otras circunstancias, hubiese sido muy buena noticia”.
“Ahora que Argentina (al igual que Brasil) también está pidiendo menos gas de lo que había adelantado, preocupa a todos, porque no tenemos la infraestructura de reinyección, donde el Gobierno debería empezar a trabajar”, añadió.
Para el ex ministro del sector Álvaro Ríos, el Gobierno pasa por todos estos problemas debido a que YPFB no cuenta con una “unidad de inteligencia”, como otras empresas, que prevea lo que ocurre en los mercados vecinos. Pero considera que la producción de Percheles es bienvenida, porque la reducción de consumo de gas es coyuntural y durará de tres a seis meses.
“El Gobierno tiene ignorancia de lo que está ocurriendo en los mercados vecinos, por lo que debe tener esta unidad para no pasar las vergüenzas que está pasando, de conocer todo a último momento”, sostuvo.
Ambos analistas recomiendan la diversificación de mercados y la producción de LNG (gas líquido), para evitar más problemas.
Todavía no se firmó con TBS
El contrato con la empresa Transborder Service Gas (TBS), para exportar gas natural a la generadora de electricidad de Cuiabá en Brasil, todavía no fue firmada, debido a que se requiere de la aprobación del Gobierno brasileño, informó ayer el viceministro de Desarrollo energético, Misael Gemio.
Aunque las negociaciones se encuentran bastante avanzadas y ya existe un acuerdo, la firma depende de la aprobación del Gobierno de Brasil para la reanudación del suministro de termoelectricidad y del visto bueno de los socios de la TBS, explicó la autoridad, en la ciudad de Santa Cruz.
Bolivia tiene un excedente de 2,2 millones de metros cúbicos diarios (MMmcd) de gas para exportar a Cuiabá, hasta mayo, mes en que San Paulo (Brasil) volverá a incremenrtar su demanda.
´Estamos haciendo esfuerzos para programar el volumen mínimo en firme (fijo)” , que será de 0.7 MMmcd, que requiere la generadora de Cuiabá para mantenerse en funcionamiento.
La paralización de las operaciones de la generadora inclusive ha generado discusión legal en Brasil, manifestó Gemio.
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