A nivel nacional, 230 surtidores fueron sancionados por el expendio de diésel y gasolina de forma irregular, toda vez que gran parte de los carburantes vendidos de esa manera son destinados a la producción de droga, así lo informó el responsable Nacional de Sustancias Controladas, Remo Pérez. Asimismo, señaló que en Bolivia ya se tiene identificadas las zonas que más incurren en dicha irregularidad, cabe mencionar que son también las que mayores casos de fábricas de narcotráfico repostaron.
“Las zonas rojas han sido identificadas en los Yungas, Chapare, Yapacaní, Guayaramerín y la frontera con Perú en Desaguadero, son lugares por donde se da el contrabando permanente de combustible de manera ilegal”, dijo Pérez.
Los castigos. Muchos funcionarios de los surtidores sancionados fueron implicados por la venta irregular de combustible. En ese marco, la autoridad señaló que los operativos continuarán, tanto en las fronteras como en las “zonas rojas”.
Según el responsable nacional de Sustancias Controladas se realizó la sanción de las distribuidoras de carburantes, en el marco del Reglamento de Operaciones de Surtidores.
Más control al sector. La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) pretende implementar el proyecto B-Sisa que permitirá controlar en tiempo real la compra de combustibles. El B-Sisa incluye en un solo sistema informático a todos los automotores del país para conocer quién compra el combustible, en qué cantidad y en qué punto del territorio.
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