EL DEBER
si bien las empresas petroleras que operan en el país oficializaron que invertirán $us 254 millones, además de gastos y capital de operaciones que asciende a $us 333,7 millones para garantizar el mercado interno y la exportación de gas a Brasil y Argentina, el impacto en el aumento de la producción de hidrocarburos recién se observará a fines de diciembre de 2008, señalaron fuentes gubernamentales y expertos del área energética.
Altas autoridades del Ministerio de Hidrocarburos y funcionarios de YPFB admitieron que el país está imposibilitado por el momento de cumplir todos los contratos externos, especialmente el de Argentina.
El criterio es compartido por representantes del sector hidrocarburífero, que aclaran que pese al enorme esfuerzo que realizan para hacer nuevos trabajos de exploración, éstos recién podrán apreciarse en el mejor de los casos a mediados del próximo año. Se estima que las compañías pueden perforar cinco pozos en un año.
Según las fuentes consultadas, cada pozo en Bolivia puede producir entre 1 millón y 1,5 millones de metros cúbicos día de gas (MMm3/d), lo que quiere decir que se producirán 5 MMm3/d adicionales, con lo cual se garantizará el mercado nacional y el externo.
“Si partimos de que la producción nacional en este momento es de 40 MMm3/d, de ellos 6 se destinan al mercado interno, 32 a Brasil y a Argentina se envía el resto. Con los cinco millones más que se pueden producir, se puede cubrir los mercados pero recién en los próximos 18 meses. Antes de este lapso, continuará el déficit del energético y Bolivia estará imposibilitado de cubrir todos los contratos”, aseguró un analista.
Al respecto, el analista energético Carlos Kinn afirmó que con los nuevos compromisos se cierra un nuevo capítulo de las relaciones entre las compañías y el Gobierno.
“Las empresas han presentado sus planes de desarrollo y su cronograma de inversiones aceptando los compromisos de exportación y del mercado interno, y hacia adelante, sólo resta la ejecución de los mismos. Esto asegura dos cosas: provisión para el mercado interno y los contratos de exportación de gas a Brasil y Argentina. Si Cuiabá está paralizado es porque en tres años no hubo inversiones en nuevos pozos”, acotó.
La estatal petrolera YPFB señaló que hasta el pasado lunes se registró para el mercado interno 6,63 MMm3/d; para el GSA de Brasil 28,2; a Cuiabá 1,21 (actualmente no se envía gas); y a Enarsa de Argentina 4,94. Se precisó que los volúmenes varían de acuerdo con el requerimiento de Brasil.
El ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, apostó que para el 2008 habrá una inflexión en materia de inversiones. Los montos consignados, según la autoridad, son para el desarrollo de campos, para producción e infraestructura.
Las petroleras consideran que éste es un primer paso para reactivar al sector.
Sin embargo, aclaran que aún faltan los grandes compromisos asumidos por más de $us 3.000 millones.
El Gobierno y Ashmore negocian
El Gobierno informó ayer del inicio de las negociaciones para recuperar el control de la transportadora de hidrocarburos Transredes, participada en un 50% por la británica Ashmore y cuya nacionalización fue prometida por el presidente, Evo Morales.
El ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, dijo que a partir de la próxima semana se llevarán a cabo "reuniones sistemáticas" con los ejecutivos de Ashmore, similares a la que sostuvieron en pasadas horas.
Según Villegas, la compañía británica le ha expresado en reiteradas ocasiones al Gobierno su intención de acatar la nacionalización de Transredes decretada en mayo de 2006.
Ashmore posee actualmente el 50% de Transredes, mientras que el 34% está en manos de la estatal YPFB y el resto lo controlan pequeños inversores.
El ministro no dio detalles de cómo ni cuándo se concretará la nacionalización de la transportadora y se limitó a subrayar que el
Gobierno no va a negociar a través de los medios de comunicación.
Agregó que el Gobierno de Morales no tiene premura y que no va a negociar de forma simultánea al proceso con Transredes la recuperación de Andina, filial de la hispano-argentina Repsol YPF, y de Chaco, del grupo British Petroleum, también nacionalizadas en mayo de 2006 pero que siguen en poder de las trasnacionales. Transredes opera una red de 2.500 kilómetros de ductos para la distribución de gas natural y crudo./ EFE
Cifras de inversión
La inversión en el sector en las últimas dos gestiones ($us 198 millones en 2006 y $US 22,9 millones a junio de 2007) se encuentra entre los niveles más bajos de la última década y no son ni mínimamente comparables con los alcanzados entre 1998 y 1999, de $us 600 millones anuales. El número de pozos perforados en Bolivia durante la gestión 2006 y en lo que va de 2007 no llega a los 10 anuales, que contrastan marcadamente con los 64-65 perforados anualmente entre 1998 y 2000 y con los 1.594 perforados en Argentina.
si bien las empresas petroleras que operan en el país oficializaron que invertirán $us 254 millones, además de gastos y capital de operaciones que asciende a $us 333,7 millones para garantizar el mercado interno y la exportación de gas a Brasil y Argentina, el impacto en el aumento de la producción de hidrocarburos recién se observará a fines de diciembre de 2008, señalaron fuentes gubernamentales y expertos del área energética.
Altas autoridades del Ministerio de Hidrocarburos y funcionarios de YPFB admitieron que el país está imposibilitado por el momento de cumplir todos los contratos externos, especialmente el de Argentina.
El criterio es compartido por representantes del sector hidrocarburífero, que aclaran que pese al enorme esfuerzo que realizan para hacer nuevos trabajos de exploración, éstos recién podrán apreciarse en el mejor de los casos a mediados del próximo año. Se estima que las compañías pueden perforar cinco pozos en un año.
Según las fuentes consultadas, cada pozo en Bolivia puede producir entre 1 millón y 1,5 millones de metros cúbicos día de gas (MMm3/d), lo que quiere decir que se producirán 5 MMm3/d adicionales, con lo cual se garantizará el mercado nacional y el externo.
“Si partimos de que la producción nacional en este momento es de 40 MMm3/d, de ellos 6 se destinan al mercado interno, 32 a Brasil y a Argentina se envía el resto. Con los cinco millones más que se pueden producir, se puede cubrir los mercados pero recién en los próximos 18 meses. Antes de este lapso, continuará el déficit del energético y Bolivia estará imposibilitado de cubrir todos los contratos”, aseguró un analista.
Al respecto, el analista energético Carlos Kinn afirmó que con los nuevos compromisos se cierra un nuevo capítulo de las relaciones entre las compañías y el Gobierno.
“Las empresas han presentado sus planes de desarrollo y su cronograma de inversiones aceptando los compromisos de exportación y del mercado interno, y hacia adelante, sólo resta la ejecución de los mismos. Esto asegura dos cosas: provisión para el mercado interno y los contratos de exportación de gas a Brasil y Argentina. Si Cuiabá está paralizado es porque en tres años no hubo inversiones en nuevos pozos”, acotó.
La estatal petrolera YPFB señaló que hasta el pasado lunes se registró para el mercado interno 6,63 MMm3/d; para el GSA de Brasil 28,2; a Cuiabá 1,21 (actualmente no se envía gas); y a Enarsa de Argentina 4,94. Se precisó que los volúmenes varían de acuerdo con el requerimiento de Brasil.
El ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, apostó que para el 2008 habrá una inflexión en materia de inversiones. Los montos consignados, según la autoridad, son para el desarrollo de campos, para producción e infraestructura.
Las petroleras consideran que éste es un primer paso para reactivar al sector.
Sin embargo, aclaran que aún faltan los grandes compromisos asumidos por más de $us 3.000 millones.
El Gobierno y Ashmore negocian
El Gobierno informó ayer del inicio de las negociaciones para recuperar el control de la transportadora de hidrocarburos Transredes, participada en un 50% por la británica Ashmore y cuya nacionalización fue prometida por el presidente, Evo Morales.
El ministro de Hidrocarburos, Carlos Villegas, dijo que a partir de la próxima semana se llevarán a cabo "reuniones sistemáticas" con los ejecutivos de Ashmore, similares a la que sostuvieron en pasadas horas.
Según Villegas, la compañía británica le ha expresado en reiteradas ocasiones al Gobierno su intención de acatar la nacionalización de Transredes decretada en mayo de 2006.
Ashmore posee actualmente el 50% de Transredes, mientras que el 34% está en manos de la estatal YPFB y el resto lo controlan pequeños inversores.
El ministro no dio detalles de cómo ni cuándo se concretará la nacionalización de la transportadora y se limitó a subrayar que el
Gobierno no va a negociar a través de los medios de comunicación.
Agregó que el Gobierno de Morales no tiene premura y que no va a negociar de forma simultánea al proceso con Transredes la recuperación de Andina, filial de la hispano-argentina Repsol YPF, y de Chaco, del grupo British Petroleum, también nacionalizadas en mayo de 2006 pero que siguen en poder de las trasnacionales. Transredes opera una red de 2.500 kilómetros de ductos para la distribución de gas natural y crudo./ EFE
Cifras de inversión
La inversión en el sector en las últimas dos gestiones ($us 198 millones en 2006 y $US 22,9 millones a junio de 2007) se encuentra entre los niveles más bajos de la última década y no son ni mínimamente comparables con los alcanzados entre 1998 y 1999, de $us 600 millones anuales. El número de pozos perforados en Bolivia durante la gestión 2006 y en lo que va de 2007 no llega a los 10 anuales, que contrastan marcadamente con los 64-65 perforados anualmente entre 1998 y 2000 y con los 1.594 perforados en Argentina.
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